La directiva de ecodiseño da un paso más. El Comité de Medioambiente, Salud Pública y Seguridad Alimentaria de la Eurocámara se ha posicionado a favor de la Directiva de Ecodiseño en la que está trabajando la Comisión Europea y que pide una prohibición específica para la ropa y el calzado. 

La medida avalada por el comité prohíbe la obsolescencia programada de los productos, por lo que los productores deberán poner a disposición de los clientes reparaciones y recambios. Además, los artículos deberán contar con un pasaport que contenga información actualizada del producto. Desde el comité de la Eurocámara, han pedido que los consumidores puedan comparar los pasaportes de producto a través de una plataforma online. 

Una de las medidas que ha reclamado el órgano legislativo es que se ponga el foco en moda, tanto en ropa como en calzado. Además de prohibir productos no vendidos, el comité ha pedido al Ejecutivo que incluye una prohibición específica para los textiles y los zapatos, una petición que extiende a los dispositivos electrónicos. 

Los eurodiputados quieren que la Comisión dé prioridad a una serie de grupos de productos en la primera etapa de la medida, que se extenderá durante los primeros tres meses tras la entrada en vigor de la norma. Entre estos productos prioritarios figuran el hierro, el acero, el aluminio, los textiles (sobre todo prendas de vestir y calzado), los muebles, los neumáticos, los detergentes, las pinturas, los lubricantes y los productos químicos.

“Los productos sostenibles se convertirán en la norma, lo que permitirá a los consumidores ahorrar energía, facilitar las reparaciones y tomar decisiones ecológicas inteligentes cuando compren, ahorrándose dinero a largo plazo”, ha asegurado Alessandra Moretti, eurodiputada socialista. 

La propuesta ha salido adelante en el comité con 68 votos a favor, doce en contra y ocho abstenciones. Está previsto que el informe se apruebe durante la sesión plenaria de julio de 2023 y se constituirá la posición negociadora del Parlamento con los gobiernos de la UE sobre la forma final de la legislación. 

A finales de mayo, los Estados miembro pactaron prohibir la destrucción de artículos no vendidos, en concreto la ropa y los accesorios, dentro de la directiva de ecodiseño que prepara Bruselas.  

La medida ya ha sido implantada en Francia y forma parte de la Estrategia para el Textil presentada por la Comisión Europea en 2022, que aspira a “terminar con el fast fashion” en 2030. La Comisión propuso la medida en marzo de 2022, por lo que trabaja en la creación de un marco general que fije las bases de los diseños eco.