IRPF: Qué hacer para pagar menos impuestos antes del fin del año
Son pocos días, pero aún hay tiempo. Ampliando la mirada, la recta final del año sirve para ajustar la factura fiscal de la próxima campaña de la renta con operaciones que luego permitirán optar a mayores ventajas. Las opciones principales pasan por aportar más a los planes de pensiones, al pago de la hipoteca o calcular qué conviene hacer antes de cerrar una operación inmobiliaria o en bolsa.
Pero este año, el margen de maniobra mengua. Sobre todo por la reducción en la base imponible por aportaciones a planes de pensiones individuales, cuyo límite cae de 8.000 euros a 2.000, siempre que no supere el 30% de los rendimientos del trabajo y actividades económicas. “Es un cambio fiscal importante. Tendrá un aliciente menor. El incentivo fiscal era lo interesante ante su baja rentabilidad actual”, señala Carlos Cruzado, presidente del Sindicato de Técnicos del Ministerio de Hacienda (Gestha). En todo caso, se recomienda llegar al límite. Si hasta ahora se han aportado 1.800 euros, apurar con 200 euros más en diciembre, o lo que falte para llegar a los 2.000 mencionados.
Sin salir de los planes de pensiones, habrá que tener en cuenta el momento del rescate llegada la jubilación. El gran consejo es no hacerlo en el mismo año del retiro, al tributar como rendimiento del trabajo. “Juntas ingresos normales por las últimas nóminas con los de la jubilación y el plan. Rescatarlo en años diferidos reduce la progresividad y hay menos importes a sumar”, plantea Luis del Amo, secretario técnico del Registro de Economistas Asesores Fiscales del Consejo General de Economistas (REAF-CGE).
Así, al que se haya jubilado y piense en rescatarlo este mes, le conviene esperar. También hay que consultar los supuestos que dan acceso a reducciones del 40%, pero se aplican solo a aportaciones previas al 2007, si se rescatan de golpe y en el mismo año o los ocho siguientes de la jubilación si se dio entre el 2011 y el 2014 o en el mismo año y los dos siguientes si se hizo a partir del 2015. “En la mayoría de los casos interesa rescatar en forma de capital –de golpe– lo aportado antes del año 2007, y lo posterior en forma de renta”, apunta Paula Satrústegui, socia de asesoramiento patrimonial en Abante Asesores.
Otro ajuste de final de año es el de las cuotas hipotecarias. Para viviendas compradas con un crédito antes del 1 de enero del 2013 se permite deducir el 15% de los pagos anuales hasta un límite de 9.040 euros. Para llegar al tope, en Gestha recomiendan hacer “un pago adicional para amortizar el préstamo”. “Si pago 6.000 en el año y sumo 3.040 antes de fin de ejercicio Hacienda deducirá el 15% del total”, ejemplifica Satrústegui. Habrá que tener en cuenta si hay comisión por cancelación anticipada, pero así se conseguirá optar a la deducción máxima anual de 1.356 euros, se detalla. En el caso de la vivienda, Del Amo también recomienda repasar las ventajas por obras de eficiencia energética.
En el caso de los mayores de 65 años que vendan su propiedad habitual, tienen la ganancia exenta, por lo que convendría retrasar una operación pendiente y esperar a superar esta edad. También está exenta la venta de cualquier bien que hagan hasta un máximo de 240.000 euros si lo dedican a una renta vitalicia en seis meses.
Para los que tengan inversiones, se puede hacer un ejercicio para compensar ganancias y pérdidas patrimoniales. Por ejemplo, si se ha cerrado una operación bursátil con fuertes ganancias, para reducir la factura fiscal antes del 31 se puede vender acciones que en la actualidad estén en pérdidas. Eso sí, no se deja usarlas para compensar si se compran títulos de la misma compañía en los dos meses siguientes. También se deja compensar ganancias y pérdidas del capital mobiliario. En ciertos supuestos se pueden combinar ambos capítulos.
Además de estos consejos, los más destacados en un largo listado, en el final del año otros optan por pedir que se les aumente la retención por IRPF en la nómina si creen que saldrá a pagar la declaración. Pero si no se ha hecho ya, igual se va tarde al quedar una nómina y la extra, con “poca capacidad de reacción”, dice Del Amo. Desde Gestha lo recomiendan a gente que haya estado en ERTE este año y se haya reincorporado. “Si han vuelto al trabajo pueden pedir un incremento en la retención para evitarse un susto”, comenta Cruzado, buscando contrarrestar la insuficiente que haya podido hacer el SEPE.
