La banca recorta a mínimos de tres años el porcentaje que financia con hipoteca en la compra de vivienda
La banca está optando por extremar la prudencia para evitar que la morosidad asociada al impago de hipotecas impacte en sus cuentas. Y la vía que está empleando para hacerlo es reducir el dinero que presta para adquirir vivienda. Más concretamente, el porcentaje del valor de tasación de una vivienda que financia a través de una hipoteca, el denominado «loan to value».
Según el último Informe de Estabilidad Financiera del Banco de España publicado la semana pasada, el valor medio de la LTV registró el año pasado un descenso interanual de 2,3 puntos porcentuales para las nuevas hipotecas a hogares formalizadas, hasta alcanzar el 65,8% al final del año. Se trata del nivel más bajo de los últimos tres ejercicios.
De igual forma, el peso relativo del crédito hipotecario nuevo con valores de la ratio LTV por encima del 80% fue del 9,3% el pasado ejercicio, algo inferior al de los dos años anteriores. Este porcentaje llegó a rozar el 18% en el año 2006. Sin embargo, tras la crisis financiera del año 2008, las autoridades de supervisión bancaria entendieron que lo mejor era que las entidades limitaran las hipotecas a ese máximo del 80% del valor de tasación para evitar que la morosidad desbordase las cuentas de los bancos.
Sin relajación
A pesar de que estas ratios de LTV suponen un endurecimiento en las condiciones de crédito, el Banco de España no está dispuesto a que se suavicen los criterios para la concesión de hipotecas. La directora general de Supervisión del Banco de España, Mercedes Olano, advirtió la semana pasada durante la presentación de la Memoria de Supervisión de 2023 de que el riesgo de crédito lleva muchos años siendo una prioridad supervisora y lo seguirá siendo. El riesgo de crédito «es el primer riesgo para el sistema financiero europeo», dado el modelo de negocio de los bancos de la zona, eminentemente comercial, y los supervisores lo vigilan muy de cerca. De hecho, ya ha habido algunas actuaciones en el pasado «específicamente centradas» en revisar si se han suavizado los criterios, dijo, sin dar más detalles.
Hasta ahora, muchas familias han utilizado ahorro acumulado para repagar sus hipotecas y eso ha contribuido a la caída de la demanda, pero «ya veremos lo que pasa cuando se agote ese ahorro y las empresas tengan que volver a invertir», dijo Olano.
En el informe de Estabilidad Financiera, el Banco de España también corrobora la tendencia creciente de las compras de vivienda al contado. Así, asegura que la proporción de operaciones con recurso al crédito hipotecario se situó en el 44,7% en diciembre de 2023, por encima del porcentaje del 43,3% de junio de 2023, pero todavía por debajo del 46,1% observado al final de 2022.