Los expertos advierten que tomar bebidas isotónicas no es una solución para la gastroenteritis

Cuando se sufre gastroenteritis muchos recurren a las populares bebidas isotónicas puesto que, según la creencia popular, estas contienen minerales que aligeran los síntomas. Sin embargo, los farmacéuticos aseguran que se trata de un mito, ya que no reemplazan los nutrientes perdidos como consecuencia de la diarrea o los vómitos y, por tanto, deben evitarse cuando se sufre esta dolencia.

Lo ha advertido la Sociedad Española de Farmacéuticos de Atención Primaria (SEFAP), que recomienda la ingesta de las soluciones de rehidratación oral de venta en farmacia, ya que poseen la mitad de concentración de sodio y cloro que las bebidas de uso deportivo, y cuatro veces más de potasio. 

Especialmente en verano, estas soluciones son una medida necesaria, ya que las altas temperaturas incrementan el riesgo de deshidratación cuando se sufre una gastroenteritis. 

Lucía Jamart, microbióloga y vocal en Madrid de la SEFAP ha explicado a Europa Press que las bebidas isotónicas están diseñadas para hidratar tras una pérdida de líquido originada únicamente por ejercicio físico, y ha recordado que la composición del sudor es diferente a la del líquido expulsado por heces o vómitos. El sudor es rico en sodio y cloro, mientras que en la gastroenteritis también se pierde una cantidad importante de potasio.

La experta también ha señalado que las bebidas isotónicas que se pueden comprar en supermercados presentan composiciones muy distintas según la marca, y algunas de ellas tienen demasiados azúcares y en su totalidad «una concentración de electrolitos inadecuada».  

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Sociedad Europea de Gastroenterología, Hepatología y Nutrición Pediátrica (ESPGHAN), este aporte de glucosa extra, en casos de diarrea, puede empeorar nuestro estado al aumentar la pérdida de agua. En concreto, se podría producir lo que denominamos una diarrea osmótica. Ese exceso de glucosa en el intestino arrastra más agua del organismo, por lo que la diarrea empeora y con ello el riesgo de deshidratación. 

Tampoco recomiendan bebidas con cafeína, porque aumentan la emisión de orina (deshidratan) y pueden incrementar el número de deposiciones. Por otro lado, se desaconsejan los refrescos con gas, ya que lesionan aún más la mucosa.