Qué debemos hacer en caso de perder un cheque

Sin duda, hoy en día los cheques se usan cada vez menos en operaciones monetarias. Pero lo cierto es que a pesar que su uso haya reducido considerablemente, todavía existen personas que los prefieren. 

Los pagos con tarjeta y las transferencias bancarias, que ahora se pueden realizar desde el móvil, son solo algunas de las razones por las que los cheques bancarios estén al borde de la extinción. Según un estudio del Banco Central Europeo, en el año 2018 en países como Eslovaquia, Estonia, Holanda, Hungría, Letonia, Polonia, Suecia e Irlanda el uso de los cheques ha desaparecido por completo. En el mismo año, en España el uso de cheques bancarios no llegaba ni al 2% de las operaciones monetarias. Un número que a pesar de ser muy reducido, refleja que todavía hay quienes los usan.

En cualquier caso, para aquellos que aún utilizan este método de pago, y que han perdido o les han sustraído un cheque bancario, esto es lo que deben hacer.

De entrada hay que apuntar que perder un cheque no supone la pérdida del dinero que representa. Es decir, si un cheque se ha extraviado o ha sido sustraído, no necesariamente implica que no pueda ser cobrado, según ha explicado el Banco de España en su portal del Cliente Bancario.

Lo primero que se debe hacer en estos casos es avisar a la entidad financiera, quien tiene la obligación de proceder con el pago. Una vez la entidad tenga conocimiento, procederá con la emisión de una orden interna de bloqueo. Ahora bien, la orden interna de bloqueo reducirá el riesgo de que un tercero pueda cobrar el cheque, pero no tendrá efectos si éste ya se ha cobrado antes. 

Además, según el Banco de España, el solo aviso a la entidad financiera no garantiza que no se vaya a pagar el cheque a un tercero. Para cerciorarse, será necesario presentar una demanda ante un juez o realizar un procedimiento ante un notario.

Porque no existe ninguna norma que obligue al banco a ejercitar acciones judiciales en caso de pérdida o sustracción de un cheque, informa el Banco de España. 

Sin embargo, una vez notificados con el extravío o robo del cheque, la entidad prestará la colaboración que esté a su alcance para evitar cualquier perjuicio. Por ello, corresponde a los beneficiarios realizar las acciones judiciales necesarias para evitar que se desembolse el dinero a una tercera persona no legitimada a cobrarlo, recuperar el importe o que se reconozca su titularidad. 

Según el Banco de España, existen varios tipos de cheques. Los más comunes son el cheque al portador y el cheque nominativo. El primero, el más común, es aquel que puede ser cobrado por quien lo posea y lo lleve al banco. En otras palabras, se podrá desembolsar el importe a cualquier persona. El segundo se diferencia del primero  porque lleva inscritos los datos del beneficiario. Es decir, que quien pretenda cobrar el dinero deberá acreditar su identidad. 

En caso de sustracción de un cheque nominativo, la persona que firma el cheque podrá revocar la orden de pago transcurridos 15 días naturales desde su emisión.