El Banco de España calcula que la banca se ahorró 3.250 millones en 2022 al no remunerar los depósitos. Así lo señala la Revista de Estabilidad Financiera de la entidad hecha pública este mismo martes por el supervisor nacional.

El citado informe recoge que si bien los aumentos del euríbor se transmiten a los tipos de interés de los depósitos bancarios en España, estos no lo hacen a la misma velocidad en todos los productos. En particular, señalan que presionan al alza los tipos de los depósitos a plazo.

Por ello, admite que los incrementos del euríbor han dado lugar a desplazamientos desde los depósitos a la vista hacia los depósitos a plazo. En el artículo se documenta que, en 2022, la traslación del euríbor a los tipos de los depósitos fue más limitada de lo que habría cabido esperar de acuerdo con el patrón histórico recogido por los resultados del modelo y, en consecuencia, la subida del coste de los depósitos bancarios ha sido menor de lo esperado.

De haberse seguido los patrones históricos, señala el mismo artículo, se hubieran reducido del margen de intereses unos 525 millones de euros por mes, lo que da como resultado un total de 3.250 millones en todo el ejercicio 2022. Las razones que explican la escasa remuneración del depósito que se mantiene todavía ahora son, para el Banco de España, la amplia liquidez de las entidades y la elevada concentración en el mercado.

Beta del 25% para 2023 

Las grandes entidades financieras son aquellas que menos están retribuyendo los depósitos. En este sentido, manejan una beta (transferencia de la subida del euríbor a los clientes) de entre el 20% y el 25% en el corto-medio plazo. 

Esto es, según las cifras de euríbor actual por encima del 3,98% que los depósitos se verían retribuidos en cifras que se quedarían en el entorno del 1%, si bien hay que tener en cuenta los cambios que sufra el euríbor en los próximos meses y que parece que se quedará en un margen similar. Este dato de la beta es compartido por grandes entidades, como Banco Santander, BBVA Sabadell y Bankinter, y otras como Kutxabank, y se mantiene casi desde inicios de este ejercicio.

El sector arguye que el catálogo de productos en el lado del pasivo que permiten remuneraciones atractivas para el cliente es «muy amplio» y va mucho más allá del depósito.