España, muy por debajo de la media europea en facturas impagadas por los hogares pese al alza del coste de la vida
Alquiler o hipoteca, alimentos, gasolina, facturas de la luz… Todo ha subido de precio en nuestro país. Sin embargo, y pese a esta espiral inflacionista que ha elevado gastos extra que los hogares afrontan cada mes, solo un 21% de los consumidores españoles admite no haber pagado al menos una factura a tiempo en los últimos 12 meses. Una cifra que, a nivel europeo, asciende al 35%, la proporción más alta desde 2019. Atendiendo a estos datos, España se posiciona, junto a Portugal, como el país donde menos ciudadanos acumulan recibos impagados.
Esos dos de cada diez hogares en España, que sí aseguran haberse retrasado al efectuar el pago de sus facturas en el último año, exponen que el principal motivo de esta situación son las dificultades económicas derivadas del contexto socioeconómico actual. De hecho, un tercio -concretamente el 33% de los encuestados en nuestro país- admite que, si en algún momento tuviera que omitir el pago de alguna factura, se sentiría menos culpable que hace unos años. Un sentimiento de no poder pagar por “necesidad” que se comparte en toda Europa (31%).
El contexto socioeconómico actual, con los precios aumentando a un ritmo más elevado que los salarios, está provocando que muchas familias se vean obligadas a gastar más de lo que ingresan para hacer frente al día a día. Así se refleja en la nueva edición del Informe Europeo de Pagos de Consumidores de Intrum, del que se desprende que un tercio de los españoles (28%) reconoce que sus gastos mensuales superan en estos momentos a sus ingresos. Un porcentaje de ciudadanos en esta situación que se encuentra cuatro puntos por encima de la media europea, que se sitúa en el 24%.
Los españoles que afirman pagar más al mes de lo que ingresan, registran un gasto extra de 328 euros, frente al promedio de 232 euros en Europa. Este dato situaría a nuestro país como el segundo donde los ciudadanos tienen más gastos por encima de sus ingresos mensualmente, solo por debajo de Suiza, con 359 euros al mes. Por el contrario, Polonia (99 euros), Hungría (94 euros) y República Checa (35 euros) se posicionan como los territorios donde las familias tienen el mayor equilibrio entre sus ingresos y sus gastos.
Sin embargo, la situación de los hogares en los que los ingresos no superan los gastos tampoco es mucho mejor. Así, tres de cada diez consumidores solo disponen de un 10% de su salario tras pagar todos los suministros básicos, lo que, teniendo en cuenta el salario más frecuente en nuestro país, esa cantidad se reduce a 150 euros.
Según la Encuesta Anual de Estructura Salarial, publicada por el Instituto Nacional de Estadística (INE), el salario más habitual en nuestro país asciende a 18.502 euros anuales, por lo que, de forma mensual, los españoles disponen de 1.540 euros para hacer frente a los gastos cotidianos. Así, según el informe de Intrum, el 31% de los consumidores en España tienen de menos de un 10% de su sueldo tras pagar la vivienda y los suministros básicos, por lo que disponen de menos de 150 euros para hacer frente al resto de los gastos.
De esta forma, los hogares se ven obligados a romper la hucha para poder llegar a fin de mes. Concretamente, la tasa de ahorro de los hogares se situó en el 11,7 % de su renta disponible bruta en el segundo trimestre de 2023 -0,2 puntos inferior a la del trimestre anterior- según los datos del INE. Sin embargo, la menor inflación ha hecho que la retirada de efectivo para pagar las facturas sea menor que la de pasado año, cuando la tasa de ahorro se ha incrementado en 4,4 puntos, coincidiendo con una inflación que crecía a doble dígito.
“Las previsiones del Banco de España apuntan a que la inflación se mantendrá en este nivel en los próximos meses y, por lo tanto, las empresas y particulares se verán obligados a seguir tomando medidas de contención del gasto. Ante este escenario, se vuelve fundamental evitar el sobreendeudamiento” afirman desde la consultora.
