Hacienda desvela cómo ahorrar hasta 72.000 euros en la Declaración de la Renta

Como en cada recta final de año, los Técnicos del Ministerio de Hacienda (Gestha) ofrecen una serie de consejos para que los contribuyentes se ahorren hasta casi 2.900 euros en la próxima declaración de la renta. Este colectivo aclara que las mayores ventajas fiscales benefician a la personas con sueldos y patrimonios más elevados. Así, indican, mientras que los contribuyentes con ingresos superiores a los 600.000 euros al año podrán rebajar su factura fiscal hasta en 72.733 euros, para aquellos con rendimientos anuales inferiores a los 21.000 euros las ventajas fiscales no alcanzan los 1.390 euros.

Es una de las principales novedades fiscales que deparará el próximo ejercicio. El Gobierno quiere desincentivar las aportaciones a planes de pensiones individuales en favor de los planes de empleo, en los que sí contribuye la empresa. Por eso la aportación máxima a planes individuales descendió desde los 8.000 euros hasta 2020 a los 2.000 euros en el año 2021. Esto disminuirá el impacto en la cuota en 580 millones de euros. Además, el proyecto de ley de Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2022 contempla rebajar ese límite de aportación a los 1.500 euros.

Por eso Gestha recomienda aprovechar la recta final de este año para reducir la base imponible del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF) hasta agotar el límite con un plan de pensiones individual. Siempre, eso sí, que dichas aportaciones no superen el 30% de los rendimientos del trabajo y actividades económicas.

Teniendo en cuenta estas novedades con vistas al futuro, y en el caso de las aportaciones a un plan individual en las comunidades autónomas del régimen común, los técnicos de Hacienda aconsejan aportar hasta un máximo de 2.000 euros antes del 31 de diciembre para anticiparse a la rebaja del límite a 1.500 euros.

Conviene aclarar que este límite no afecta a los planes de pensiones vascos, las EPSV. En este caso el tipo se sitúa en los 5.000 euros, en lo que se refiere a las aportaciones individuales. Luego están los topes de aportación conjunta -realizadas por el trabajador y la empresa-, que varían en función del territorio histórico. En Bizkaia el límite conjunto está en los 12.000 euros. Y la empresarial no puede sobrepasar los 8.000 euros

Gestha subraya que, a igualdad de importes invertidos en planes de pensiones, la ventaja fiscal para las rentas más altas ha aumentado al subir en 2021 los tipos marginal en 2 puntos para aquellas superiores a los 300.000 euros. De ahí que su ahorro fiscal supere en el 150% al de las rentas medias, y casi en el 250% al ahorro de las más modestas.

De cualquier forma, el sindicato advierte a aquellos contribuyentes que en 2021 se hayan jubilado o sufrido algún tipo de discapacidad sobre los peligros de rescatar el plan de pensiones en forma de capital. Y es que actualmente no se mantiene la reducción del 40% en este tipo de rescate, salvo en lo que respecta a las aportaciones realizadas antes del 31 de diciembre de 2006. Por eso recomiendan analizar su tributación para saber qué es lo que más les conviene. Si no hay reducción, la tributación siempre será inferior rescatando el plan en forma de renta.

Quienes compraron su vivienda habitual o realizaron algún pago para su construcción antes del 1 de enero de 2013 seguirán disfrutando de la desgravación. Siempre, eso sí, que hayan tenido deducciones por esa vivienda en 2012 o años anteriores. Así, estas personas pueden deducirse hasta el 15% de las cantidades invertidas, con un límite de inversión de 9.040 euros. Teniendo esto en cuenta, Gestha considera «interesante» realizar un pago adicional -de 4.840 euros de media- para amortizar la hipoteca antes de que finalice el año. De esta forma se podrá reducir la factura fiscal en 726 euros.

Los técnicos de Hacienda repasan las nuevas deducciones contempladas por algunas comunidades autónomas. Por ejemplo, la del 10% en vivienda habitual en zonas rurales en riesgo de despoblación en Asturias. En Galicia se puede deducir el 15% de la inversión en vivienda habitual en proyectos de aldeas modelo. Los contribuyentes de la Comunidad Valenciana que inviertan en instalaciones de autoconsumo de energía eléctrica o aprovechamiento de determinadas fuentes de energía renovables en su vivienda habitual o segunda residencia particular pueden beneficiarse de una deducción del 40%.

Además, Castilla-La Mancha contempla una deducción del 15 al 25% por residencia habitual en zonas rurales, del 15% por adquisición o rehabilitación de la vivienda habitual en zonas rurales, o de 500 euros por traslado de vivienda habitual a un municipio de en zonas escasamente pobladas.

Las ganancias obtenidas por la venta de una casa en 2021 tributarán en la próxima declaración de la renta, según su cuantía, entre el 19% y el nuevo tipo del 26% -que entró en vigor este mismo año- para rentas de ahorro y ganancias superiores a 200.000 euros. Gestha aclara al respecto que si se reinvierte total o parcialmente el importe en otra vivienda de carácter habitual «será posible neutralizar este pago».

Los contribuyentes con más de 65 años de edad verán exentas las ganancias obtenidas por la venta de su vivienda habitual. También se beneficiarán de esta ventaja fiscal las personas dependientes severas o grandes dependientes. Además, tampoco computarán a efectos de IRPF los beneficios obtenidos por los mayores de 65 años por la venta de cualquier bien hasta un límite de 240.000 euros. Siempre, eso sí, que con el importe total se constituya una renta vitalicia asegurada en un plazo de seis meses.

Invertir en productos financieros es, a veces, lanzar una moneda al aire. Cuando sale cruz, es posible compensar a final de año esas pérdidas generadas en un fondo de inversión, acciones o derivados financieros con las ganancias patrimoniales obtenidas. Gestha recuerda que no se podrán adquirir esos mismos valores o similares en los dos meses anteriores o posteriores a la venta. Además, los rendimientos de capital mobiliario positivos (intereses de títulos, dividendos, venta de obligaciones o bonos, etc.) se pueden compensar con rendimientos negativos.

También es posible compensar los rendimientos de capital mobiliario negativos o positivos con ganancias y pérdidas patrimoniales con un límite del 25% del saldo positivo. Por lo tanto, si hubiera un rendimiento de capital mobiliario positivo sería recomendable -salvo en Euskadi- materializar las pérdidas en venta de acciones y otros productos patrimoniales. Y en el caso de que hubiese ganancias patrimoniales, compensarlas con rendimientos negativos de capital mobiliario.

Los contribuyentes cuyas rentas de trabajo sean -o así lo prevean- inferiores a 16.825 euros deben asegurarse, en la medida de lo posible, que no haya rentas de otro tipo. Por ejemplo, ganancias patrimoniales por venta de acciones o rentas por alquileres de inmuebles, superiores a 6.500 euros. En ese caso perderían una reducción de rendimientos del trabajo que podría llegar hasta los 5.565 euros.

Además, las ventas de acciones pueden obligar a declarar a muchos contribuyentes que de otra forma no tendrían obligación de hacerlo. Por ejemplo, a aquellos con rendimientos de trabajo inferiores a 14.000 euros con varios pagadores, o hasta 22.000 euros con un solo pagador, o si los otros pagadores no llegan a 1.500 euros en total.

Gestha recuerda que los rendimientos obtenidos por los trabajos realizados para empresas radicadas en el extranjero están exentos de tributación con un límite máximo de 60.100 euros anuales en el territorio común. No obstante, sólo se podrá aplicar dicha deducción cuando en el territorio donde se realicen los trabajos se aplique un impuesto de naturaleza idéntica o análoga a la del IRPF y no se trate de un paraíso fiscal. Además, esta exención sólo se aplica en caso de desplazamientos temporales, puesto que si el contribuyente reside en otro país ya no tributaría en España.

El Gobierno de Canarias bonificará el 100% de las donaciones en metálico a quienes hayan perdido sus viviendas por la erupción del volcán de La Palma para que compren o construyan otro inmueble en la isla. Están exentas del IRPF las ayudas por daños personales. Por tanto, no se incluyen las ayudas previstas por daños o destrucción de la vivienda habitual o en elementos comunes de una comunidad de propietarios. No obstante, los técnicos de Hacienda recuerdan que el proyecto de ley de PGE de 2022 contempla que las ayudas públicas destinadas a reparar la destrucción por el volcán «no se integran en la base imponible del IRPF».

Al margen de la catástrofe de La Palma, Gestha recomienda en esta recta final del año pedir el certificado con los datos identificativos, fecha e importe donado a entidades solidarias para aprovechar el aumento de la deducción por donativos -aprobada por el Gobierno en 2020- de hasta el 80% de los primeros 150 euros donados y el 35% del resto donado. Porcentaje que aumenta al 40% si la cantidad donada a la misma ONG no disminuye en cada uno de los tres últimos años, con el límite del 10% de la base liquidable.

Las cuotas de afiliación y aportaciones a partidos políticos pueden deducirse en un 20%, con el límite de una base máxima de 600 euros. Por su parte, las cuotas sindicales y de colegios profesionales deducen de los rendimientos de trabajo -estas últimas con un límite de 500 euros-, así como los gastos de defensa jurídica de litigios en la relación laboral con el límite de 300 euros anuales.

La deducción para amigos y familiares de tercer grado de los emprendedores es de un 30% de la inversión en la cuota estatal del IRPF al suscribir las acciones o participaciones de la sociedad. La base máxima de la deducción es de 60.000 euros anuales, limitada a una participación -junto con su cónyuge y familiares hasta el segundo grado incluido- no superior al 40% del capital de la entidad, y cuyos fondos propios tampoco podrá superar los 400.000 euros al inicio del periodo de la entidad en que el inversor adquiera las acciones. Además, se establece la exención total de la plusvalía al salir de la sociedad. Siempre, eso sí, cuando se reinvierta en otra entidad de nueva o reciente creación.

Gestha subraya que esta deducción es «la más potente» del IRPF, puesto que permite deducir adicionalmente 1.274 euros de media a quien financie una empresa reciente, si bien se precisa invertir otros 4.246 euros.