La voz de nuestros mayores
Extremadura envejece. No es ninguna novedad. Cada vez hay menos habitantes en nuestra región y el porcentaje de personas mayores de 65 años crece imparablemente.
Son varias las razones que hacen que nuestra población envejezca, pero quizás las principales sean el aumento de la esperanza de vida y el descenso de la natalidad.
En la actualidad, Extremadura tiene 221.168 mayores de 65 años, que representan el 20,72% de la población. Son casi dos puntos más que en 2009, pero cinco menos de los que prevé el INE para dentro de una década. Esto significa que en 2.029, uno de cada cuatro extremeños tendrá más de 65 años.
Por ese motivo, nos preocupa cual es la situación de los mayores de 65 años en nuestra región, y por ello, hemos salido a la calle y hemos realizado casi 300 entrevistas de forma personal a ese colectivo de extremeños, a los que le hemos preguntado sobre su salud, la vivienda, la economía, el ocio, las nuevas tecnologías, las preocupaciones y como no, el futuro, entre otras cuestiones.
Los datos
Para realizar este informe, hemos trabajado con un universo de referencia de 221.168 personas mayores de 65 años en nuestra región. La muestra obtenida ha sido de 290 personas de más de 65 años y jubiladas, en el ámbito geográfico de la Comunidad Autónoma de Extremadura. El instrumento de recogida de información ha sido un cuestionario estandarizado, con la realización de entrevista presencial. El margen de error es ± 5%. Con un grado de fiabilidad de 95,5%.
Hemos realizado encuestas en las localidades de Badajoz, Cáceres, Coria, Don Benito, Mérida, Plasencia, Navalmoral de la Mata y Villanueva de la Serena. Hemos entrevistado a 156 hombres y 134 mujeres. Las edades las hemos dividido en cinco tramos de 65 a 69 años, de 70 a 74, de 75 a 80, de 81 a 86, y de 87 años o más.
La vivienda
La vivienda bien que podamos poseer, sino el lugar donde hacemos hogar, además de protegernos y cobijarnos de casi todo. Por este motivo, una de las preguntas que realizábamos era ¿dónde vives? Pues bien, el 79,3% reside en una vivienda de su propiedad, le sigue el 8,6% que vive en una residencia, a continuación está el 7,2% de entrevistados que dice vivir en casa de otro familiar (normalmente hijos), y por último el 4,8% que vive de alquiler.
Si nos fijamos en el tramo de edad, los mayores de 87 años, el porcentaje que vive en una residencia se dispara por encima del 47%. Este porcentaje desciende hasta el 28% para aquellos que están entre los 81 y 86 años; y también es en esta edad los que más se han trasladado a vivir con familiares, con un 15,38%.
Desde que nacemos estamos compartiendo nuestra vida (padres, pareja, hijos…), nos parecía importante saber con quién viven nuestros mayores. Así el 53,8% de los encuestados nos manifestaba que vive en pareja; en segundo lugar con un 21% están los que viven solos; a continuación le siguen los que viven en familia con un 16,20%, y por último los que viven en otras circunstancias (compañero habitación, piso, etc.), con el 9%.
Desgraciadamente la soledad es un problema que actualmente viven nuestros mayores y, de hecho, más del 35% de los encuestados mayores de 81 años nos informan que viven solos.
La economía
Sin ningún tipo de duda, la economía juega un papel muy importante durante toda la vida de un consumidor adulto. Pero para que exista economía deben de existir ingresos, por este motivo, le preguntábamos a nuestros encuestados si disponían de pensión, de que tipo (jubilación o viudedad), y cuál era su cuantía.
Afortunadamente, el 84,5% de los encuestados dispone de pensión, aunque más del 15% no tiene, la gran mayoría mujeres, porque está casada y depende de la pensión de su cónyuge.
De los que afirman tener pensión, el 86,10% es de jubilación, y el resto de viudedad, donde la gran mayoría vuelven a ser mujeres.
Pero, ¿qué cantidad cobran los extremeños en relación a sus pensiones?. Según nos manifiestan los encuestados, el 34,8% tiene una pensión entre los 601 y 900 euros. Le siguen con el 30,8% que ganan entre los 901 y 1.200 euros; quienes ganan más de 1.201 y menos de 1.500 euros son el 17%, le seguirían con el 11,30% los que cobran entre los 401 y 600 euros. Y en las dos últimas posiciones están con un 4% los que ganan más de 1.500 euros y con un 2% los que tienen una pensión por debajo de los 400 euros.
Como dato podemos apuntar que la gran mayoría de mayores que tienen una pensión entre los 901 y 1.200 €, viven en pareja, contando únicamente con estos ingresos.
Si tenemos en cuenta los ingresos en función del sexo, los hombres son los que más ingresos perciben, situándose por encima del 44%, los hombres con pensiones entre los 901 y 1.200 euros, cuando la mujer se queda en el 10,20%.
Los gastos
De la mano de la economía vienen los gastos. En este sentido, los extremeños destinan su mayor gasto, con un 27,24%, a la alimentación. Los que más gastan en alimentación son los de edades comprendidas entre los 65 y 74 años, estos últimos se sitúan por encima del 33%. En el caso opuesto, con el menor gasto en alimentación están los que superan los 81 años, con un 14% de media.
Desgraciadamente, cuando hablamos de gastos, la gran ma-yoría pensaría en alimentación, vivienda, servicios… Sin embargo, nuestros mayores incluyen como gastos las ayudas economías que tienen hacia sus hijos, ocupando la segunda posición con un 26,55%. Esta posición se sitúa en primer lugar con más de un 44 y 35% respectivamente para los mayores de 81 y 86 años.
El tercer mayor gasto se dedica a la vivienda, con un 21,72%, y muy por detrás los suministros, viajes y ocio, y ayuda externa con un 6 y 5% respectivamente.
Sin embargo, nos llama la atención que en el tramo de edad de más de 87 años, algo más del 35% de los encuestados dedican su mayor gasto a la contratación de esta ayuda externa.
La brecha digital
Existen dos conceptos que se han popularizado en los últimos años y que, sin embargo, rara vez vemos juntos: brecha digital y envejecimiento activo. Cuando hablamos de esta brecha, pensamos en zonas rurales con precarias conexiones a Internet, pero la brecha digital también es generacional y está protagonizada por esas personas mayores que hacen todo lo posible por mantenerse activas física y mentalmente. Ahí es donde entra en juego el uso cotidiano de Internet, una pieza clave para que nuestros mayores sigan formando parte activa de la sociedad. Ante este escenario si disponían de conexión a internet en su domicilio, y el 60,96% nos ha contestado que sí, lo que es una gran noticia.
Cabe destacar que este porcentaje se incrementa por encima del 86% para el tramo de edad de entre 65 y 69 años, y que va descendiendo conforme se incrementa la edad, de tal manera que supera algo más del 15% para los mayores de 81 muy escaso y que deberíamos procurar que aumentara..
En el caso de internet en el móvil, desciende hasta el 51,03% quien dispone de este servicio. No obstante, vuelve a incrementarse hasta el 85,06% para los más “jóvenes” (entre 65 y 69 años). Igual que con el internet en casa, desciende el número de usuarios que tienen acceso a internet desde el móvil conforme se va cumplimiento años, de tal manera que los mayores de 87 años encuestados manifiestan no tener internet en el móvil, y sube algo más del 10% los de edades comprendida entre los 81 y 86 años.
El whatsapp se ha convertido en una aplicación utilizada por la gran mayoría de usuarios de móvil. Tanto es así que el 49,66% de los encuestados manifiesta utilizar esta aplicación, y vuelve a incrementarse hasta superar 85% en los menores de 69 años, descendiendo conforme se incrementa la edad.
Sin embargo es menos habitual disponer de una dirección de correo electrónico, ya que tan sólo el 35,5% tiene email. Este dato refleja los problema que pueden tener nuestros mayores cuando se les comienza a obligar a recibir sus facturas del móvil, suministros de electricidad o gas, etc., por correo electrónico. Quizás en este dato se refleja el problema que podemos vivir a la hora de relacionarnos con las empresas en formato digital, pues corremos el riesgo de dejar aislada una población tan importante como nuestros mayores.
Sin salud no hay nada
El paso el tiempo nos afecta a todos y el efecto de los años acaba pesando en nuestra salud. Sin embargo, afortunadamente, el 61% de la población considera su estado de salud bueno o muy bueno. Esta afirmación se incrementa por encima del 85% para los menores de 69 años, bajando hasta el 72% para los mayores con edades comprendidas entre los 70 y 74 años.
En el extremo opuesto está el 9,31% que los considera malo o el 29,66% que lo cree regular.
No existen diferencias entre sexos, pero sí entre edades. Así, es lógico establecer peor estado de salud en las edades más avanzadas, sobre todo teniendo en cuenta que se incrementan las limitaciones. Tanto es así que, a partir de 81 años, los que consideran su estado regular están por encima del 58%.
Nuestra salud está relacionada con la asistencia sanitaria. En este sentido le hemos preguntados a nuestros encuestados cuántas visitas realiza al mes a su médico de atención primaria. Nos ha llamado poderosamente la atención que el 33,79% de los usuarios no realice ninguna visita durante este periodo.
Los que sí van al médico, lo hacen tan sólo una mes al mes, así nos lo indica el 42% de los encuestados. Con dos visitas mensuales se sitúa el 16,55%, y tan sólo el 8% manifiesta ir al médico 3 ó 4 veces a la semana.
De los que manifiestan asistir al médico, el 53,7% lo hace para realizar una consulta, el 26,4% para recetas médicas y el 18,90% por asuntos con enfermería.
Sin ninguna duda, el sistema sanitario público tiene que estar siempre al servicio del ciudadano. En este sentido, hemos preguntado a nuestros encuestados por el grado de satisfacción con el Sistema Extremeño de Salud: para el 69% de los encuestados nuestra sanidad es excelente o buena, el 24,80% opina que es regular, y el resto indica que es mala.
Venta puerta a puerta
Quizás uno de los principales problemas con los que nos encontramos en determinadas sectores de la población, como son nuestros mayores, es la venta puerta a puerta, ya que este tipo de ventas suelen ser agresivas, recomendando siempre no abrir la puerta a comerciales de ningún tipo si previamente no hemos solicitado dicha visita. En este sentido, el 68,6% de los extremeños encuestados nos confirmado que han recibido una visita de un comercial en el último año.
El ocio y el cuidado de los nietos
El dedicar un tiempo de nuestra vida al ocio es fundamental para salir de la rutina, es bueno practicar algún deporte, hobby, etc. En este sentido el 68,62% de los encuestados manifiesta realizar alguna actividad de ocio a la semana, no existiendo diferencias importantes entre sexos.
El cuidado de los nietos no puede considerarse como tiempo de ocio, más bien como obligaciones que se imponen nuestros mayores, con el fin de ayudar una vez más a sus hijos. En este sentido, el 44,5% no se encarga nunca del cuidado de sus nietos, el 33,40% lo hace esporádicamente (bodas, enfermedades, etc.), y el resto 22,10% lo tiene como una obligación más durante la semana.
El presente y el futuro
Las personas mayores de 65 años han vivido lo suficiente como para echar la vista atrás y ver cómo ha evolucionado una sociedad. Teniendo en cuenta el bagaje de los años, hemos preguntado a los extremeños como ven la situación actual, y desgraciadamente su percepción no es nada buena, ya que el 46,6% la considera regular, el 31,70% mala y tan sólo el 21,70% la considera buena.
Fruto de estas respuestas, creíamos fundamental preguntar cuales son las principales preocupaciones. En este sentido, la mayor preocupación para nuestros jubilados son las pensiones, le sigue el paro y por último la economía.
Pero existen más preocupaciones para los extremeños, como es donde preferirían residir en un futuro cuando no puedan vivir solos por necesitar cuidados asistenciales. El 39% se decanta por una residencia, le siguen muy de cerca, con un 34,10%, los que prefieren continuar en su casa con ayuda de una tercera persona, y por último con un 26,90% los que les gustaría vivir con algún familiar.
Una preocupación de todos
¿Cómo me sentiré cuando sea mayor? Quizás esta es la pregunta que nos hagamos muchos a lo largo de nuestra vida, aunque tardemos pocos segundos en dar respuesta (ya se verá).
Es preocupante los datos que reflejan el informe que hoy publicamos, donde las media de las pensiones en nuestra región están por debajo de los 900 euros, incrementándose a los 1.200 para los que afortunadamente viven en pareja. Con estos ingresos, nuestros mayores no sólo hacen frente a su principal gastos (alimentarse), sino que destinan una partida muy similar para ayudar a sus hijos, en detrimento de su propio bienestar. Y eso que saben que con el paso de los años su mayor partida estará relacionada con la contratación de ayuda externa para poder soportar el día a día.
Hoy por hoy, vivimos en la era digital en nuestra vida social, comercial, administrativa… Sin embargo, quizás ahora más que nunca, tenemos que proteger a un colectivo especial, los “analfabetos digitales”, con el fin de que no se sientan excluidos o incapaces de formar parte de la sociedad
El panorama de soledad actual entre los sénior es una realidad, no es una inquietud fundada, deberíamos de saber todos que la soledad no elegida es uno de los problemas acuciantes de nuestros mayores.
Con todos estos datos que hoy reflejamos en este informa, es lógico que el colectivo de la tercera edad, a menudo, reivindique su integración en la sociedad y pida su no aislamiento por el mero hecho de ser mayor.
Sobre estos ejes, economía, sanidad, brecha digital, futuro, giran las preocupaciones de los mayores de 65 años en nuestra región.
© Estudio realizado por la Unión de Consumidores de Extremadura en Noviembre de 2019.