La crisis económica causada por la pandemia ha dificultado hacer frente a los gastos que, en su mayoría, no se han visto reducidos. Es por ello que en la época festiva podría haber un incremento de las famosas tarjetas que permiten flexibilizar las compras aplazando los pagos, pero que tienen intereses abusivos, como ya se ha demostrado en varias ocasiones, como el pasado mes de marzo, cuando el Tribunal Supremo declaró usurario los intereses de las tarjetas , en este caso emitidos por Wizink y que poseían un TAE superior al 27%.
La controvertida tarjeta a simple vista parece sencilla y atractiva pero encierra grandes peligros. Las «revolving», que son conocidas por sus intereses abusivos, suelen ir acompañadas generalmente de una absoluta falta de transparencia en su comercialización.
Estas tarjetas se suelen comercializar en hipermercados, aerolíneas, hoteles, tiendas de muebles, tiendas de ropa y supermercados, bajo el nombre de empresas conocidas, pero están asociadas a entidades o bancos. Firmas como Inditex, Iberia, Renfe, Cepsa, Vodafone, Fnac, Decathlon o Meliá ofrecen la tarjeta en las que detrás se encuentran entidades bancarias como Santander, BBVA, Wizink, Sabadell, Cofidis, Caixabank o Bankinter.
En muchas ocasiones el producto incluye un seguro del cual el consumidor no tiene conocimiento, como informan desde el Portal del Cliente Bancario del Banco de España y es la suma de estos multiples desconocimientos por falta de transparencia el motivo por el cual, en líneas generales, por una tarjeta revolving, el usuario puede llegar a pagar el doble o más de la cantidad prestada y puede tardar hasta 15 años en devolverlo.
Gracias a la sentencia del Tribunal Supremo todos los usuarios que utilizan tarjetas revolving con tasas de intereses demasiado altas podrán reclamar las cantidades pagadas hasta ese momento, dependerá del caso personal que se realice el reembolso tanto de los intereses como de las comisiones indebidas aplicadas y es por ello que recomiendan el apoyo de expertos.
Se recomienda comenzar el proceso recolectando cualquier prueba que pueda avalar los pagos efectuados a la entidad estos pueden ser tanto el contrato firmado como cualquier medio o documento donde aparezcan todos los movimientos provenientes de la tarjeta y el interés TAE aplicado. Después, y con los documentos en mano hay que pedir a la propia entidad bancaria de la tarjeta ‘revolving’ que reembolse las cantidades al cliente vía declaración de nulidad de la tarjeta por ser los intereses aplicados usureros así como por incumplimiento del principio de transparencia e incorporación.