La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) ha propuesto elevar a 592 el número de municipios, donde vive el 67% de la población española, en los que Telefónica no estará obligada a dar acceso mayorista a su red de fibra óptica a otros operadores, frente a las 66 ciudades actuales, según la recoge la nueva regulación de los mercados mayoristas de banda ancha.
El regulador justifica esta ampliación en que cuando estableció la actual regulación en 2016, en la que obligaba a Telefónica a alquilar su red a un precio regulado a cualquier operador que lo solicitara excepto en 66 grandes municipios (el 35% de la población), las líneas de fibra representaban el 23% del mercado, y actualmente suponen cerca del 70%.
Además, añade que la presión competitiva del mercado ha aumentado de manera considerable y Telefónica continúa perdiendo cuota en el mercado minorista de acceso de banda ancha fija, ya que pasa de un 43,1% en 2015 a un 38% en 2020.
Como suele suceder, la norma va muy por detrás de la situación del mercado. Y es que, en la práctica existen tres redes y media de fibra ópticas tendidas por los tres principales operadores (Telefónica, Orange y Vodafone) y, en menor medida, por MásMóvil. Además, los operadores han llegado a acuerdos comerciales entre sí para el despliegue conjunto de redes de fibra en muchos territorios.
La propia CNMC admite que desde la última revisión se ha producido la entrada efectiva de un cuarto operador de ámbito nacional, MásMóvil, y que tanto Euskaltel, con el lanzamiento de su marca nacional Virgin, como la rumana Digi han ampliado sus ofertas en términos de producto y alcance geográfico con respecto a 2016.
Más de 50 millones de líneas
Sumando la red de todos los operadores, actualmente hay 51 millones de accesos de fibra óptica aunque solo 10,5 millones de negocios y hogares tengan contratada este tipo de conexión, lo que supone una cobertura del 82% de los domicilios y oficinas, muy por encima de la media europea, que se encuentra por debajo del 30%.
La Comisión explica que la zona competitiva se caracteriza por una elevada competencia en infraestructuras basada en redes de nueva generación (fibra y cable), ya que en cada uno estos 592 municipios la cuota de Telefónica en el mercado minorista de banda ancha es inferior al 50% y existen, al menos, tres redes con una cobertura mínima del 20%.
En esta zona, la CNMC plantea que Telefónica mantenga sus obligaciones de acceso a la infraestructura de obra civil, así como las obligaciones de acceso desagregado al par de cobre. Sin embargo, no impone obligaciones de acceso mayorista a su red de fibra.
En este sentido, explica que el acceso a la infraestructura civil permite a los operadores alternativos hacer uso de los conductos y postes de la red de Telefónica, de forma que puedan desplegar sus redes de fibra óptica desde las centrales cabecera de Telefónica hasta los domicilios de los usuarios finales. El resto del territorio (7.539 municipios) está considerado como zona no competitiva, por lo que la CNMC propone que Telefónica siga estando obligada a prestar los servicios mayoristas de acceso a los operadores que se lo soliciten.
Los operadores interesados disponen ahora de un mes para presentar sus alegaciones a la consulta pública. Tras analizar los comentarios recibidos, la CNMC aprobará un proyecto de medida que se remitirá a la Comisión Europea, así como al Ministerio de Asuntos Económicos y Transformación Digital.