Los Gobiernos cubrirán las indemnizaciones por los posibles efectos adversos de la vacuna
El sector público pagará la factura de las indemnizaciones por posibles efectos adversos de las vacunas frente al Covid-19 que se administren en Europa. Las farmacéuticas que desarrollan estos productos serán indemnizadas para que afronten esas compensaciones, aunque la responsabilidad final recaiga en la empresa. Así se desprende de las comparecencias en una comisión de ayer en el Parlamento Europeo aunque las cláusulas de los contratos entre la Comisión Europea (CE) y los fabricantes siguen siendo confidenciales.
La CE redactó esas cláusulas de responsabilidad confidencial en los contratos firmados con AstraZeneca y con el consorcio formado por Sanofi y GSK, y además está negociando condiciones similares con otras firmas para la compra anticipada de sus vacunas experimentales. Las autoridades europeas han decidido acordar con la industria este tipo de esquemas predecibles para compensar a las posibles víctimas y así poder cerrar acuerdos con las compañías, que reclaman un marco legal que les permita seguir invirtiendo en el desarrollo de estos productos.
Sue Middleton, presidenta de la patronal Vaccines Europe, que representa a los grandes fabricantes, apuntó en su intervención en el Parlamento Europeo que en caso de efectos secundarios imprevistos habrá una indemnización, recoge Reuters. Un portavoz de la CE asumió que los acuerdos de compra anticipada con las empresas “prevén que los Estados miembros indemnicen al fabricante por ciertas responsabilidades incurridas bajo condiciones específicas y estrictas”, pero “la responsabilidad sigue siendo de las empresas”.
Diferentes fuentes de la CE han venido asegurando que la protección legal parcial ofrecida por la UE obstaculizó previamente los acuerdos de compra anticipada en los últimos meses y llevó a los fabricantes de vacunas a pedir más.
El riesgo que las compañías quieren poner encima de la mesa y temen es que por la urgencia para responder a la pandemia haya reacciones adversas no previstas en humanos, un peligro remoto porque el proceso está vigilado por la Agencia Europea del Medicamento (EMA, en sus siglas en inglés).
EE UU ofrece una cobertura total de responsabilidad a los fabricantes de vacunas porque la inoculación generalizada contra la enfermedad se considera un beneficio para la sociedad.
La presidenta de la patronal –que incluye a laboratorios como Pfizer, Sanofi, GSK, Janssen, AstraZeneca y MSD, entre otros– también pidió una compensación sin culpa en los 27 Estados de la UE, lo que aceleraría la resolución de disputas legales. Dicho sistema existe en 11 países, pero su aplicación a los casos de la vacuna no siempre está clara, apuntó. Ese sistema sin culpa reduciría las incertidumbres legales y los costes para las empresas.
Estos esquemas también permiten a los ciudadanos reclamar compensaciones de forma más rápida, aunque la indemnización tiene un tope y generalmente está muy por debajo de lo que normalmente se puede otorgar en una demanda exitosa por responsabilidad por productos defectuosos.