La Comisión de Sanidad y Consumo del Senado aprobó este martes -por 16 votos a favor, ninguno en contra y 13 abstenciones- la moción del Grupo Parlamentario Popular en la Cámara Alta por la que insta al Gobierno a establecer, en un plazo máximo de seis meses, los mecanismos necesarios para suprimir o eliminar definitivamente las numeraciones 902 y 901 en los servicios de atención al cliente.En su defensa de la moción, la portavoz de los populares, Paloma Inés Sanz, subrayó que este tipo de numeración «siempre ha estado en el punto de mira» por, a su juicio, «haber sido en muchas ocasiones una vía de aplicación de costes elevados» para el consumidor.
En este punto, precisó que el coste de la llamada a una de estas numeraciones desde un móvil es hasta seis veces superior al coste de un teléfono fijo y recordó que ya el 2 de marzo de 2017, el Tribunal de Justicia de la UE resolvió que los 902 «no se pueden utilizar para la prestación de servicios de atención al cliente».
Además, las empresas que actualmente dispongan de uno de estos servicios con esta tarificación deberán «modificarlo» por una línea 900 gratuita o por un número geográfico, generalmente incluido en las tarifas planas o, en su defecto, con un coste de tarifación básica.